AIRE ACONDICIONADO PARA USO DOMÉSTICO

Con la proximidad de la época estival se acercan las altas temperaturas y, también, la odisea por encontrar zonas de refrigerio en las que poder descansar sin derretirse. Con el verano cerca surge la idea de adquirir un aparato de aire acondicionado para disfrutar de la climatización doméstica a la carta. ¿Sabes cómo encontrar el equipo más adecuado a tus necesidades? Fíjate en las opciones disponibles, sus características técnicas… ¡y elige!

La cuestión más importante a tener en cuenta a la hora de seleccionar un aparato de aire acondicionado es que cuente con la potencia suficiente para climatizar la estancia o estancias deseadas de la vivienda. Para conocer cuál es basta con consultar las tablas de cálculo que relacionan la superficie del espacio a enfriar con la orientación de las ventanas y la potencia necesaria o solicitar la ayuda de un experto que le indicará qué tipo de aparato le conviene.

¿Qué se debe tener en cuenta en la búsqueda de un aparato?

Sin embargo, existen algunos factores que se deben tener en cuenta para encontrar el aparato de aire acondicionado más adecuado para el hogar. El clima y la humedad ambiental es uno de ellos: si la vivienda está situada en una zona poco húmeda necesitará menos potencia. De hecho, si el ambiente es seco, los expertos recomiendan optar por un aparato que incorpore un humidificador.

Otro de los condicionantes es la situación de la vivienda, si se encuentra en un entorno urbano. A medida que se incrementa la altura en un edificio, aumentan las temperaturas que registra y, por lo tanto, requerirá de una máquina de más potencia para su correcta climatización. Además, se debe tener en cuenta el tamaño de las habitaciones a refrigerar, así como los elementos de iluminación presentes en ella: ten en cuenta que la luz halógena es una gran fuente de calor por lo que influirá en la temperatura de la estancia.

Tipo de instalación, ruido, eficiencia…

Existen, principalmente, cuatro tipos de sistemas de aire acondicionado: el sistema monobloque de ventana, el monobloque móvil, el Split fijo y el Split móvil. Examinamos, a continuación, sus características básicas:

• El monobloque de ventana, también conocido como acondicionador de ventana, exige un montaje profesional para su colocación en el hueco de una ventana o en una pared y su mayor desventaja es que se trata de uno de los equipos más ruidosos del mercado.

• El sistema monobloque móvil no precisa una instalación técnica, puesto que no se coloca de forma fija. De hecho, incluye ruedas, por lo que puede cambiarse de lugar en función de la longitud del tubo extractor de calor. Es el equipo con mayor consumo del mercado, por lo que se recomienda, sobre todo, cuando la dificultad de instalación hace imposible el montaje de otro tipo de aparato.

• El acondicionador Split (o Split móvil) no requiere la ayuda de un experto para su montaje e incluye ruedas que permiten su movimiento. Sin embargo, cuenta con algunas desventajas importantes: hace bastante ruido, no asegura la total regeneración del aire y exige la permanente apertura de una ventana a través de la que se abre paso el tubo.

• El Split fijo necesita la mano de obra de un profesional para su instalación y no asegura la total renovación del aire en la estancia a climatizar. Entre sus principales ventajas destaca que es silencioso en el interior y muy eficiente, lo que le convierte en el equipo más demandado del mercado.

Además de los mencionados, también se debe valorar la opción del sistema de aire acondicionado por conductos y las máquinas con bomba de calor Inverter. La primera alternativa es la más adecuada cuando es necesario climatizar más de una estancia y, aunque el coste de la instalación es elevado, compensa gracias al ahorro energético que ofrece. La segunda posibilidad permite el uso del aparato en verano para enfriar y en invierno para calentar la vivienda. Además, si incluye la tecnología Inverter la eficiencia está garantizada.